CERATI....El Angel Eléctrico

Estaba saliendo de viaje cuando las redes sociales estallaron con la noticia de que Gustavo Cerati había fallecido.....inmediatamente me acordé de Gaby Bustamante quien tiempo atrás me había sugerido que escribiese sobre Cerati en Viernes de Virtuosos

Recuerdo que le dije: "Prometo hacerlo aunque sabes que no soy soy un conocedor de su trabajo y ciertamente no soy su seguidor"..............Creo que a Gaby no le gustó mucho mi sincera declaración. Hoy creo que a Muchos no les gustaría escuchar mi declaración pues es Inmensa la Legión de seguidores de Cerati.

Se me hace difícil escribir hoy sobre Cerati pues reconozco mi falta de conocimiento sobre su trayectoria y legado; además, creo que es algo "académico" que yo escriba cuando el mundo entero se volcó en elogios ante su partida. Pero hay algo que si puedo decir y reconocer y es el impacto que sobre toda una generación y generaciones subsiguientes dejó la Música de Cerati.

Con frecuencia hablo del "Sonido Propio" y no hay duda de que Gustavo Cerati logró eso y más,  pues el Mundo de la Música le trata de Genio y los conocedores no dudan en catalogarlo como el Músico de Rock mas grande de habla hispana.

Me encontraba entonces en un inmenso dilema para escribir sobre el tema cuando recordé la opción de "Preguntarle a un Amigo". Sin pensarlo mucho pedí ayuda y recurrí a mi amigo y músico Gonzalo Bernal, el violinista y cantante lider de la Banda La Unica; le dije..."Gonzo; que tal sin me das una mano....hagamos el ejercicio de que tu escribes para Viernes de Virtuosos sobre Cerati".....

Gracias a Dios cuento entre mis amigos con gente tan talentosa y generosa como Gonzalo. Estoy seguro de que disfrutarán de su escrito tanto como Yo.

El Ángel Eléctrico

Titiritábamos del frío, había llovido por un largo rato y el agua nos había calado hasta los huesos, habíamos tratado en vano de salvar los fósforos y los cigarrillos para calentarnos, pero todo había sido inútil. La espera parecía eterna, imposible de superar.

Pero luego vino el milagro. La guitarra de Gustavo calentó, como un sol que había llegado temprano a su trabajo, los ateridos corazones de los que habíamos decidido enfrentarnos al clima a sabiendas de que la recompensa valía la pena. Era el Festival Iberoamericano de Rock de Caracas, el año 1991.

Y así fue siempre que Soda Stereo y luego Gustavo Cerati, en su carrera como solista, pisaban un escenario; su música, infinitamente compleja y simple a la vez, cargada de frases melódicas que se enganchaban en nuestra mente y alma, transmitiendo mensajes líricos que parecían estar hechos a la medida de las circunstancias personales de cada uno de los allí presentes, hacían de cualquier sacrificio una nimiedad, una tontería, una excusa injustificable.

Desde 1983, Gustavo Cerati no hizo sino innovar en todos los aspectos que conforman no sólo la música rock en español, sino el espectáculo y el uso de tecnología  para la producción musical. Soda inauguró los conciertos masivos, de grandes escenarios, con luces y efectos nunca antes vistos, pero sus tres guerreros, Gus, Charlie y Zeta, acompañados por varios de los mejores instrumentalistas de ese tiempo como Tweety González o Daniel Melero, amplificaban su virtuosismo en sus respectivos instrumentos con efectos y mezclas que sin duda hacían del sonido de la banda, uno poderoso, denso, pero diabólicamente amigable, accesible, tanto, que recuerdo las reuniones de amigos, previas a cada concierto de Soda Stereo o de Cerati en las cuales, siendo un cuatro el único instrumento disponible, aún calentábamos motores desgañitándonos con Persiana Americana o Cuando Pase el Temblor.

Se ha ido un genio, un creador de proporciones gigantescas, un pionero de la evolución del rock en español, alguien que tendió un puente entre tantos nuevos géneros, sin ahuyentar ni a los puritanos del rock n’ roll, ni a las más jóvenes legiones de seguidores del pop, Gustavo le abrió la puerta tanto a Café Tacuba como a Juanes, la noción de  ser una Estrella del Rock en Español ya no es extraña o no se limita a las leyendas del Tri, Spinetta o Sui Generis, sino que es conocida y cercana, porque Gustavo la llevó prácticamente a cada rincón del continente, ya sabemos cómo luce alguien que tenga esa distinción, gracias a que vimos a Gustavo lucir así desde hace mucho tiempo.

Una de las canciones que más me gusta es Ángel Eléctrico (Soda Stereo, Sueño Stereo, 1995), allí Gustavo dice: “Ya pagué por quebrar la calma” y es verdad, Cerati jamás pudo detenerse, descansar, relajarse, había quebrado la calma de la música para siempre. Ahora es sin duda un Ángel Eléctrico.

Descansa genio y: ¡Gracias!

Gonzalo Bernal

Arlington, 11 de septiembre de 2014 





Gracias a Ti Gonzo....este Viernes de Virtuosos es Tuyo....Llévatelo